Panamá
Este engaño no es parte de la naturaleza del ser humano, según expertos
TRACCIÓN
Al parecer, la canción del reggaesero Aklim ‘Nadie se escapa de ser vena’o’, no está lejos de la realidad de los panameños, pues a una cuarta parte de la población le han montado los cuernos.
Este dato fue revelado por la encuesta CID Gallup, que indagó sobre los celos de pareja.
Ser infiel es romper la confianza de la pareja cuando se mantienen secretos alejados de la intimidad conyugal.
Según el sexólogo, Guillermo Rolla Pimentel, esta conducta se da cuando en la relación de pareja no hay suficiente comunicación, satisfacción sexual ni emocional.
Explicó que se es infiel cuando una de los dos cambia físicamente (se engorda o se enflaquece) o cuando no saben elegir su pareja con el tiempo buscan alternativas.
Rolla Pimentel aseguró que la infidelidad no es parte de la naturaleza del ser humano.
Mujeres, igual queman
Las mujeres (33.6%), según la encuesta son las que más han llorado por haber sido víctimas de esta tracción.
Sin embargo, el sociólogo, Marcos Gandásegui, dijo que en esta sociedad tanto el hombre como la mujer son infieles.
Esta traición no es castigada por la ley, pero sí por la sociedad en que la vivimos (religión) que no permite este hecho, dijo el sociólogo.
‘Este engaño ha existido siempre en nuestra sociedad’, resaltó.
En la Biblia se menciona la infidelidad en el libro Hebreos 13:4, el cual indica que el adulterio es un pecado contra Dios y contra el cónyuge.
El infiel es una persona que miente, engaña, deshonra y lastima a su pareja.
Doble traición
Pero quien no ha sufrido una infidelidad al doble, al sentir que dos seres queridos te traicionan: tu novio o esposo con tu mejor amiga.
Esta situación la han vivido muchos panameños, tal como le sucedió a Milagros Vargas, de 30 años, quien confesó al diario El Siglo, que su exprometido, hace cuatro años, la engañó con su mejor amiga.
‘Es un dolor saber que dos personas que quieres juegan contigo; es como si se te cayera el mundo’, expresó.
La ciudadana admitió que desde ese acto terminó ambas relaciones y como secuela de esta traición perdió la confianza en las personas.
Plasman esta realidad
El dolor de esta traición ha sido plasmado por diversos artistas en sus obras, tal es el caso del pintor italiano Paolo Veronese, con su pintura ‘La infidelidad’ y la de Federico García Lorca en su romance ‘La casada infiel’.