Internacional
Reino Unido estaba listo para ayudar en el secuestro de las más de 300 niñas, pero fue hasta un mes después que aceptaron el apoyo
El presidente de Nigeria rechazó durante semanas ayuda internacional para buscar a más de 300 adolescentes secuestradas de una escuela por extremistas islámicos, que es una de las serie de traspiés que ha ocasionado un enojo creciente en el mundo contra su Gobierno.
El Reino Unido, excolonizador de Nigeria, dijo por primera vez en un comunicado, que estaba listo para ayudar un día después del secuestro masivo ocurrido el 15 de abril y realizó una oferta formal de asistencia el 18 de abril, según la oficina británica de Relaciones Exteriores.
Estados Unidos (EE. UU.) ha dicho que su embajada y agencias en esta ofrecieron ayudar y estuvieron en contacto con el Gobierno de Nigeria ‘desde el primer día’ de la crisis, según el secretario de Estado John Kerry.
Sin embargo, fue hasta el martes y miércoles, casi un mes después, que el presidente Goodluck Jonathan aceptó ayuda de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y China.
La demora subraya que ha sido un enorme problema en el intento de encontrar a las jóvenes: una aparente carencia de urgencia por parte del Gobierno y las fuerzas armadas, por razones que incluyen un rechazo a traer extraños, así como una posible infiltración por parte de los extremistas.
Neoyorquinos marchan
Decenas de personas marcharon ayer en Nueva York en apoyo de las más de 200 niñas secuestradas en Nigeria por la milicia radical islámica Boko Haram, un suceso por el que también se han organizado varias vigilias en esa ciudad del noreste de EE. UU.